miércoles, 19 de noviembre de 2008

Poesía y entrañas


Cuando la arena se hizo vestido

abrazaste el mar sin vereda,

trenzando cabellos de espuma,

saltando todas las cercas.


Si tu pie se quebró en el camino

no fue por temor a abrir puertas,

sino a olvidar que las cerraduras

para algunas llaves fueron hechas.


La imagen que te refleja el destino

desenfocada la ves y

no atino

a entender cémo el calor de tu vientre

yo siento centrado en el mío.


Atusa tu pelo y con lazos

celebra el son de la vida

que abierta espera tu vuelta;

tú, siempre dispuesta

a extender tus abrazos

y a no cerrar puertas.

1 comentario:

irene dijo...

Poesía y belleza eres tú.