viernes, 12 de febrero de 2010

Detenida y sintiendo


Entre pasos el tiempo se paraliza, adquiere la consistencia gelatinosa de una materia por atravesar, a mi alrededor los niños corren y hasta sus gritos parecen ralentizados por la irrupción de una sensación que no alcanzo a nombrar. Son los rayos de sol colándose entre las hojas, haciéndolas más verdes si cabe, mientras una brisa marina las mueve como una madre. Es el aire que entra por los agujeros de mi naríz ensanchándola, llenándola de vida. Hoy respiro más mientras cruzo el patio del colegio y camino por las líneas blancas que delimitan los campos de juegos. Será que la primavera apura su paso y ya se van los hielos que quedaron adheridos a las pieles de otros fuegos ya apagados. Es la primavera que, como siempre, me sorprende y me anuncia su llegada con voz suave: de secreto. Este año me ha cogido así, de imprevisto, colgando su perfume en mi pelo e invitándome a revivir de nuevo como yema de árbol. Es mi cuerpo alborotado que se hace pájaro, hierba, flor, charquito-espejo. Ese sentirme observadora en quietud mientras todo a mi alrededor se mueve. Ese notar el ritmo del corazón del mundo en el que vivimos tom tom tom tom .... Ya llega, ya llega la primavera

miércoles, 3 de febrero de 2010

Sueño andaluz


Taconea en mi sueño una copla
que habla de verdes y leños.
Caracolea acentos sureños
respirando trufas, mazapanes y huevos.
Sin querer sigo bailando
al son que deshiela el invierno,
me pregunto dónde está el final
de este collar sin su dueño.
El perro que ladra a la luna,
a golpe de manchas y azares,
trenza melodías de pizarra
que se quedaron sin azahares.
Y el camino se hace grande
paso a paso,
tras las horas.
No me despiertes,
no hagas ruido...
cierra con cuidado
ventanales,
dejando pasar la sonrisa
de amapolas y trigales...
Ya más tarde la gúadaña,
la parca con su negro velo,
desocultará los ases de la manga
a pesar de todos los cielos.
Volantes de la orilla de mi falda
rebrotad en los parques de las sierras
acunemos silencios y trapecios
que redoblen en el país de los sueños.