jueves, 20 de diciembre de 2007

Navidubis


Hola
acabo de ser arrebatada por el espíritu de Navidad más infantil.... Acá estoy en la biblioteca rodeada de los niños, con quienes me paso todos los mediodías desde hace dos meses, escuchando villancicos en el ordenador. Jingle Bells para ser exactos. Ver sus cabecillas moviendose y cantando la musiquilla, me ha hecho volver al espíritu de aquellos años en los que las navidades aparecían como la época más luminosa del año, la que esperabas durante los largos días de clases en una cuenta atrás llena de esperanza.

Llevo meses maldiciendo la Navidad, fuera de todo espíritu alegre o celebrante y en dos minutos estos niños me han hecho volver a ponerme el pijama de princesas y sonreír pensando en el árbol, en los regalos, en los villancicos, en la familia.

Les doy las gracias y mi cariño. Gracias chicos.
FELIZ NAVIDAD

martes, 18 de diciembre de 2007


En acción de gracias me encuentro, tras releerme y sentirme.

Acunada en el ritmo de la vida, siento tu mano en mi mano, tu pecho de madre, tu protección de padre.

Tras mis pasos, la suave música de los astros atrae a mi camino mil casualidades con causa. Creo que creo aquello que necesito y aparece ante mi lo que pido. La palabra Gracias me nace en la boca, dirigida a todo y a nada, no sé con quien hablo, no sé si en este acto íntimo, que ahora se muestra compartido, mi interlocutor comprende mi apertura y mis ansias. Supongo la no importancia de conocer, y si la de sentir, esta comunión de encuentro que mi mente recibe cada día, esta sensación de infinitud que encuentro cuando no hay límite que me ate al suelo si salgo a volar.

Sin perfiles que enmarquen la realidad sensible, lo múltiple se hace uno y soy una con todo. En este regazo divino no encuentro espacio ni tiempo, mi personalidad, mi yo se funde con la tuya, con la de ella, con la nuestra, con aquello que somos todos más allá de apellidos y labores.

Esta es mi experiencia de lo divino, de la divinidad sin rostro ni nombres, tal y como yo la recibo, tal y como se me manifiesta en los más diversos caminos. Sé que hay una vía, por lo menos así lo concibo, es la belleza en el mundo, un amanecer, una hoja, la blancura de una nube, las arrugas en una anciana, la mirada amorosa de un amigo, la luz de la ciudad al desperezarse, todas aquellas cosas que hacen que me nazca una sonrisa en el rostro que no puedo retener, que da mis pies ligereza de ave, que convierte la acera en un campo de amapolas... En definitiva, que me reconcilia conmigo misma y con el mundo, el espacio, los demás, todo lo que me rodea.
Por poder realizar esto sin esfuerzo, por darme de bruces con la belleza y la alegría doy gracias desde todo lo que soy a quien corresponda....

lunes, 17 de diciembre de 2007

Sobresaltos


Mis pasos conocen el camino

que lleva de vuelta

al jardín donde las flores

son marchitas.

Inicio el ascenso de la cuesta

que corta mi respiración acelerada,

aprieto en los bolsillos mi manos,

mientras corro a las alturas

como caballo desbocado.

Me elevo sobre el paisaje

que no se me revela novedoso,

paro en el filo de una nube,

enganchada en los hilos

de un teléfono

que borra su agenda cada mañana.

Los números olvido entre el polvo

que quito de mis libros, de mi música,

atenta a las abejas que zumbando

entran en mi ventana cuando silbo.

Todo pareciera aquietado,

suspendido, tranquilo

más cuando subo la cuesta

y encuentro lo que miro

un sobresalto ocupa mi alma,

un sobresalto y me agito.

miércoles, 12 de diciembre de 2007

Ritmo


Mecida como ola

mi melena
juega
a ser brisa

que escape a las rocas

serena,

sin prisa.

Si siento que vuelo,

me contraigo y expando,

primavera e invierno

flor y gusarapo.

Al ritmo del universo

me hago cosmos

y,

el resto,

se funde en oscuro

crisol de los los cerros

que amarillos apuntan

al techo.

martes, 11 de diciembre de 2007


En la marea me duermo

abrazada a las algas,

soñando universos,

tejidos con versos,

en mi piel escrita

por tinta: tus besos.

Al alcanzar la ola

su crepitar de espuma,

te vas como vienes,

coronado de luna.

En la arena

palpitando

encuentro naciendo

boreal la aurora,

níveos, mis sueños.

Móstrarte quisiera

mis entretelas,

mis entrañas,

mis cuencas,

para que vieras

que hasta el tuétano

empeño en tus maneras.

Si Selene entierra

azul las lágrimas,

abismo insondable

abre con saña.

Protegida del viento

peino aromas

que juntar contando

las amapolas.

viernes, 7 de diciembre de 2007

A los amigos futuros



Enciendo una vela,


como faro en la costa presento para que escuches mi llamada.


A ti que no conozco todavía pero que presiento a mi lado compartiendo mi anhelo.


A ti que mis palabras buscan en colchón risueño.


Mis brazos acunan dialogos cómplices que comulgar sin sueño.


Cuando llego, mi sonrisa encuentra tu gesto, amigo que se alegra al encontrame.


Al partir, el corazón calentito y las manos en ofrenda, no saben de restos ni adicciones, no esconden el sentir, reciben y se ofrecen, se acercan cuando se alejan manteniendo el hilo invisible del que siempre se sabe cerca.


No te busco, te espero, segura de que encontrarás la forma de reconocerme, entre las frias nieblas de la ciudad abierta.

Qué dicha nos espera! En el cruce de caminos liberaremos palomas mensajeras, que lleven la señal que nos alerta, aquella que descubre si hay almas gemelas cerca.


Pronto, muy pronto, olvidaremos quejas producidas por el silencio, soledad encubierta con otros encuentros desafinados, con agujas desinteresadas que niegan la palabra, que rechazan el regalo de la presencia, aguando mi ojos ante tu ausencia.


Al amigo que viene espero, abrazo, me entrego y dirijo mi ruego para que venga sin pausa por el año nuevo.


A los amigos ya encontrados mi amor entero y mi nostalgia perpetua, mientras el tiempo nos teje pasarelas de mimos y noches despiertas.

lunes, 3 de diciembre de 2007

me expreso


Si mil alfileres clavándose

en el portal de tu seno

lograsen que el agua manase

allá donde sólo hay desierto,

usaría mi boca como alfiletero.

Más las palmeras que riegas

sombras solitarias producen,

que no sofocan ni calman
invierno sin aguacero.


Tras la lluvia

apresuro

el paso

y no espero

que el paraguas de tus ojos

esté buscando pañuelo.

Aguijones que no clavo

sientes en tu pecho,

sin porfiria,

sin veneno,

están hechos mis sueños

que suelto sin correa

esperando un movimiento.

jueves, 29 de noviembre de 2007


En la cornisa de mi melena,

con destellos brillantes,

te espero llena,

a la lumbre suave,

de palabras plena.

Si mis pies se desatan

y no esperan,

a un pliegue de tus labios

me sujetas.


Rindo mis huestes,

sin estandartes

sin fanfarrias,

sólo la sal ilumina

en mi mirar el tuyo.


La frontera que delimito

abres sin llave ni enojo,

brisa sobre mi costa

que provocas en suspiro.


Tus palabras que atropellas,

escucho en confesión,

si, no ves?

si, no sientes?

Si, veo. Siento.

pero quiero palabras

con las que hacer mi cama,

con las que prender mi pelo,

con las que calentar invierno

pintando relojes que corren,
raudos,
pese a mis intentos
de que el sol se quede
sin espacio o tiempo.


jueves, 22 de noviembre de 2007

La muerte


Pese al título de esta entrada, hoy ha salido el sol.

Mis mohos se han secado y he podido volver a sonreír.

Atrás lluvias y nostalgias.


Hoy se ha muerto Fernando Fernán Gómez, grandísimo actor, hombre de cultura, persona con compromiso. Y lo que me nace es que, desde hace un tiempo a esta parte, cada vez se mueren más personas a las que considero referentes culturales o personalmente admirables. El paso del tiempo es así.

Imagino lo descomunal que debió de ser para mi abuela, nacida a principios de 1900, el cambio radical que pegó el mundo.

Así que, entre el vértigo que me da que se me mueran mis "adorados" (que no pienso nombrar, para no acelerar el proceso) y la sensación de coño! que mayor me estoy haciendo que ya parezco mi abuelita, estoy en un estado de sorpresa o de shock (según se mire).

Pienso en el tiempo en el que casi no queden personas con las que hablar de música o de teatro o de literatura, (eso sí, pienso caminar con los tiempos, así que confío en las futuras generaciones, espero...) porque la novedad y la rapidez en la que vivimos no den la eternidad como antaño. Quien recordará dentro de unos años a Britney Speers (non sei como se escribe), o a actrices de miles de películas que pasan sin pena ni gloria.... o a tropecientos galanes que hoy son famosos y dentro de unos meses no recordamos ni su nombre.

Puede alguno de los actores actuales españoles acercarse a la calidad de un Fernán Gómez, puede alguno de los escritores actuales esperar ser recordados como García Márquez? No sé, no sé. No dudo de las calidades, dudo de que puedan resistir el paso del tiempo.

Siempre me ha resultado curioso el pensamiento de escribir para perdurar, mi escritura siempre ha sido una especie de fast food, de perrito caliente que ahora está y ahora desaparece y que si te cae, pues no importa demasiado no?

Ahora sigo escribiendo por necesidad, por la necesidad de recobrarme y salvarme de naufragios y pérdidas, pero sigue teniendo esa inmediatez de lo perecedero, de lo que no va a conservarse.

Nunca he pretendido sobrevivirme, pero si hay muchas personas que lo necesitan y dedican su vida a dejar una huella (material) en el mundo. Mis huellas serán invisibles.

miércoles, 21 de noviembre de 2007


Desde cuando el amor se razona? De tanto nombrarle he olvidado su significado. Ya no sé si le conozco o si es un viejo desconocido. Estoy atascada. Dejo que mis manos recorran este teclado sin el más mínimo atisbo de convicción de que hallaré una respuesta que me convenza de que hago y digo lo que es en realidad. El amor se escabulle cuando intento agarrarle, cuando le doy cuerda me pisa los talones. Ahora viene y ahora se va.
Si lo reconozco se vuelve hostil, volviéndome la cara mientras me hace burla. Cuando no lo hago sus ojos se llenan de ternura y acaricia con tacto de seda... Alguien me puede decir qué es el amor????
Esta palabreja usada, manida, nombrada en todos los idiomas, fundamento de poesias, pinturas, casi podríamos decir que el amor es la base del ser humano. Amor a la propia vida, amor al otro, amor a lo que hacemos. Todos estaríamos de acuerdo en declarar absurda una vida vivida sin amor. Sin embargo ¿podríamos ponernos de acuerdo en establecer unas pautas de definición? No lo creo. De lo que pensamos dependerían cosas como el estado de ánimo, la persona o situación de la que hablasemos, el continente, el tiempo atmosférico, la vida familiar.... un sinfin de condicionantes que influirían en nuestras palabras, en nuestra posición ante el amor.
Yo no encuentro su definición. No la sé.
Muchas veces reniego de encontrarla, otras me ilusiono pensando en que acá está, o que nos han engañado prometiéndonos un dorado que nunca brilla como quisieramos....

Noviembre

No ví en noviembre

aniversarios y flores.

No llegó el olor de las castañas

que calientan soportales.

La campana que tañe arañas

corta el badajo, la garganta.

Quintana de muertos

que a mi muerto resucitas,

la tierra que deposito

sobre ti se remueve

en espiral interminable.

Lluvia inundando mis huecos

gris sin piedra,

plaza sin palabras.

Debajo de mi paraguas

me siento chiquita,

desaparezco

no siento, no veo,

no huelo, no saboreo,

no toco.

Por la madriguera

me hago conejo,

atrapo mi sombra

y le regalo un sombrero.

martes, 20 de noviembre de 2007

Lírica tras decepción



La poesía puede ser una buena medicina para la decepción.


Tras el sentimiento que lo asola todo, la falta de confianza en cada centímetro de este planeta, en los cuepos de sus pobladores, después del pozo y la oscuridad.


De vivir intentando no sentir cada latido de tu corazón como una tortura, porque parece que grita lo que tus oídos no quieren volver a oir.


Después de bajar a los infiernos una y otra vez gritando para ayudar a una Eurídice que ya no reconoce, después de la desesperación,


la poesía se ofrece como un refugio.


La poesía abre una senda de luz que recorrer despacio, llenando huecos poco a poco, con una claridad de amanecer nuevo, de desconocimiento, de safari sin brújula en el que en ocasiones te devoran los mandingas y, en otras, encuentras lagos azules en los que sumergirte.


Es la poesía que encuentro a mi alrededor la que me protege de los gusanos, de la podedumbre que, como residuo, aún queda en mi.


Veo los estragos de la decepción en mi misma. Veo su dolor cuando afloran. Pienso que, como las cicatrices de las cirujías, siguen ahí hasta que te vas.
Al fin y al cabo, la decepción nos quita, como los cirujanos, una parte de nuestro interior.
Es el recuerdo de una operación que necesita analgésicos durante largo tiempo y que, en las noches oscuras y húmedas, duele como un músculo artítrico.


Sólo si encuentro la poesía a mi alrededor, si creo en las metáforas del camino, del proceso de vivir, sólo si me descubro embelesada observando la luna, puedo volver a confiar, a creer, a sentir.... sin aullar.

domingo, 18 de noviembre de 2007

Salgado


Las fotos de Sebastián Salgado huelen.

Están llenas de aromas que como polvo en suspensión se te meten por las rendijas de la piel y te transforman el ánimo, las ropas, los colores. No soy ya una espectadora ante un impresión gráfica, me transformo en el ojo que mira, en el oído que escucha, en la boca que grita mientras el humo atora mis pulmones.

Más allá de cualquier paternalismo occidental, de los ojos de la compasión desde el sillón y las cazadoras calentitas, no es el suyo un mensaje mesiánico, no hay salvación ni caridad en su objetivo. La vida surge fuera de toda consideración obólica, hay un conformismo a que se presente como tal, nos invita a sentirnos parte de ella o a alejarnos sin mirar atrás. No es denuncia, es canto a la diferencia, a la alegría, a la esperanza y también al dolor y la desesperación. Es la captación del instante, de ese momento mágico en el cual todo se revela sin juicio. Es esa falta de crítica de la desnudez de las imágenes la que hacen que se nos remuevan las tripas, porque la fotografía de salgado toca directamente en las entrañas de quien se coloca en frente.

viernes, 16 de noviembre de 2007

Simas-si más


Simas
en las que caerte
si más
sientes
que piensas,
si más
escuchas,
si más
lloras,
si más
te acercas
que te alejas.

Simas
que te engullen
como gusanos de arena.
Con armadura ligera
aguanta el calor
que entre los dos generamos
y nace una flor.
Si
te acercas a ella
más
lejos el invierno,
si
huyes del espejo
más
caverna y laberinto.

Tú decides
Simas
o si más.

lunes, 12 de noviembre de 2007

Pre-posición


A las puertas de tus brazos,
ante herraduras y suertes,
cabe la dulce espera
con estrellas en las sienes,
que,
contra las parcas del tiempo
de otras vidas pasadas,
desde mi va llegando
hacia ti, suavemente,
para coincidir

por un segundo,
según relojes de arena,
sin muros invisibles
sobre la esperanza que entrega
tras mi pre-posición nueva.

jueves, 8 de noviembre de 2007

La profesión


Profesión, profes-or, -ar, profes-ional.
(Del lat. professĭo, -ōnis).
1. f. Acción y efecto de profesar.
2. f. Ceremonia eclesiástica en que alguien profesa en una orden religiosa.
3. f. Empleo, facultad u oficio que alguien ejerce y por el que percibe una retribución.
hacer ~ de una costumbre o habilidad.

Profesar

(De profeso).
1. tr. Ejercer una ciencia, un arte, un oficio, etc.
2. tr. Enseñar una ciencia o un arte.
3. tr. Ejercer algo con inclinación voluntaria y continuación en ello. Profesar amistad, el mahometismo.

De todas estas acepciones (gracias a la corrección gramatical de una compañera, bueno, al menos de oficio) la que más me gusta es esta última. Amistad e inclinación. Ser amigo de los actos por los que sentimos predilección, en definitiva, ser amiga de una misma, estar inclinada hacia la dirección en la que sonreimos, nos apasionamos, en la que el tiempo deja de contar y todo alrededor se vuelve borroso.
He tardado 18 años en encontrar la profesión de profesar de profesora. Comenzó siendo algo muy parecido a una procesión, con su imagineria dolorosa y la promesa celestial. Ahora sigo en el camino que nunca se cierra, en el camino que se bifurca para todas partes, sin saber nunca a donde te va a conducir. En el camino de interrogarse, de dudar si puedo hacerlo mejor, si hay algún interés oculto tras de mi tarea. Descubriendo curriculums ocultos, descubriendo los jirones de enseñanzas antiguas y caducas, que reinventar, que cubrir con nuevos pensamientos y emociones.
Esta profesion que profeso me enseña todos los días cosas nuevas, me cuestiona todo, me reta para ser mejor persona, para no quedarme en lo caduco, para ordenar mi sistema de prioridades. A veces me siento como en una cuerda floja, con todos esos pares de ojos que me miran, esperando el gran salto mortal que acabe en caida al vacio. Nunca nos dijeron que los profesores se equivoquen, yo creo que es en esto en lo que consiste nuestra tarea. Mostrar que nada viene del acierto, que todo nace del probar, una y otra vez, límites, fronteras, nuevos horizontes, caidas y recaidas, sueños, quimeras, fracasos... ¿Acaso no es eso la vida??? No tenemos que levantarnos una y otra vez, reinventando, adaptando, revisando???
Por qué un sistema de enseñanza en el que se tiene tanto miedo al error????
Se habla de fracaso escolar y se cuantifican contenidos y memorias, por qué no enseñar a aprender del error, a errar, a reponerse de ellos, a darles la vuelta y hacer que se vuelvan luminosos, fecundos, preñados de sabiduría.
A-prender si fuese esta palabra etimologicamente así, significaría no sujetar.... no fijar, dejar suelto... ¿Qué maravilloso serían las escuelas entonces no?
Para ellos y ellas, para nosotros y nosotras, que dulce la vida en la que el error no se recrimine, sino que se premie, como el pie premia al primer escalón que le conduce a su destino.









miércoles, 7 de noviembre de 2007

El hombre diez


Ayer encontre en mi bolsillo

un hombre diez.
Amarillento por el paso del tiempo conservaba la belleza de las fotos sepias de las abuelas.
Me miro de soslayo, cautivador, provocativo.
Cuando decidí acercarme comenzó a preguntarme por Dios, Al contestarle que era en mi interior donde se encontraba, abrio con su mano mi alma y acarició las herdumbres que riegan lo que soy. Hablamos durante horas de los comos, los cuandos, los porqués.
Mi cuepo tañó con virtud, toda la materia inerte cobró el movimiento preciso.
Sus aficiones coleccioné con ahinco, pues eran las mias. Sus palabras prendí de mis ojales, sus pies danzaban con los mios; recorrimos nubes y aguaceros. Cuando en extasis pronuncié su nombre se deshizo como niebla, pues niebla era.
Y amanecí en los brazos de un hombre corriente

lunes, 5 de noviembre de 2007


En el borde de mi abismo

me contemplo desnuda.

Las arrugas que me surcan

arado, abono, fragua.

Si creyese en la semilla

que planto junto el agua,

tejería cestos

para contener mis frutos

sin lluvia, sin rayos, sin truenos...

sin sol.

¿es posible que a los años

se les reste lo que suman?

Adicciones incredulas

de parcas malsanas.

Ontología para adultos

que olvidaron las cometas

para coser en la cerca

más barreras al alma.

Sin espiritu,

sin energía

es esa vida

atrapada

por las consignas de otros,

por los desvelos sin llagas.

domingo, 4 de noviembre de 2007

Mirada de otoño


Paseo por el bosque siguiendo tu paso.
Los ojos... en la espesura, en la piedra que quiebra el pie; para no caernos pregunto a los árboles el camino de regreso y son los cuervos quienes graznan en un tiempo de aventuras. Siguiendo tu paso me encuentro matices de colores ocres, de naranjasamarillos, serenos. Camino segura con tu aliento en mi cuello. Olvido las miguitas que sirven de recuerdo y es tu mano la que guia, y es mi pie el que confia en que no nos perderemos.
Si mi aliento se agita y me vence el esfuerzo, tu sonrisa me rescata dándome brios nuevos. Mil armonías de niñez siguen el compás de palabras que acarician el alma y es en ti en quien creo, es en ti en quien me busco, es en ti el reflejo del sol en el agua, de esta cálida tarde de invierno.

miércoles, 31 de octubre de 2007

Con los dragones verdes


Del sabor de tu boca,

como fruta,

nació,

ayer,

un dragón verde.

Sus ojitos, diminutos,

abrieron brecha de fuego

por la que se me va la risa,

y se cuela el miedo.

Ya luché con dragones

en el pasado,

fieros, adultos,

conocidos de los sueños....

Pero este es un niño,

recién nacido,

en pañales,
terso,
frágil
y pequeño.

De mirarlo,

me desarma,

pero
no por ello

teme su embite

mi socarrada alma
tizón
de otras llamaradas.

Así que lo miro,

lo temo,
lo quiero.

En la imposibilidad

de moverme,

espero.

martes, 30 de octubre de 2007

Para el frio polar


La chaqueta que te ofrezco, tiene por mangas mis brazos. Por cuello mi boca, por bolsillos mis manos. Los botones que la cierran abren tus ojos claros, para salvar las distancias, los frios, los hielos. Si, acaso, te quedara corta o larga, ancha o estrecha las tijeras que la arreglan apuran años, traen recuerdos, accesos cortos a los que llegar sin duelos.
Mi cuerpo encuentra el calor de tu alma tras cada hormiguita negra que anda sobre el cristal hecho espalda que acoge nuestros comienzos. Tu luz de mi luz se hizo amiga, alumbrando los espacios estrechos. No dudo de tu abrazo, de tu cariño, de tu celo. Es mi vida la que alumbras en los tiempos de tormenta; sé que llego a buen puerto si, detrás de las mazmorras, es tu voz la que hace el eco de mi risa, de mi llanto, de mis dudas y recuerdos.
Así que amiga, hermana, parte de mi alma, recibe hoy este abrigo, este recuerdo, este sentimiento para que te dé calor y te acoja en las largas noches de invierno que junto a el van mis manos, mi luz, mi cuerpo, mi yo entero.
Te quiero

lunes, 29 de octubre de 2007

Mujeres




A las mujeres quiero agradecer su presencia en mi vida, su mano que invita, su mirada que sostiene, su aliento que alimenta, sus críticas que despiertan. A las mujeres de mi vida invito a acompañarme, a crecer siendo hermanas, a buscarnos juntas, a charlar sin tema, a ocuparnos con pereza del sol que bosteza, a BAILAR desenfrenadas, a hacer la cena, a correr por los pasillos de los bosques sin veredas.



Gracias mujeres por ser mujeres, por la fuerza y la delicadeza que inspiráis en mi vida

domingo, 28 de octubre de 2007


Ventanas sin cristales
me llevan a un tiempo
de algodones,
donde me veo
sin reservas.
El vino que me embriaga
no está hecho de uvas,
sino de plumas y caricias:
dedos con flores
que toco con embeleso.
Tu nombre invoco,
en tiempos de hijos
de impaciencia
muertos
A ti llama mi mente
en el silencio
de la piedra gris
que me contempla.
De ti mis labios
callan.
De ti mis ojos
recuerdan.
De ti mis manos
añoran:
el lugar
sin sombras
en el que las grietas
se cierran.
A ti canto en la mañana,
acción de gracias
en noviembre.
Por tus vientos
bebo,
por tu risa
siento.
Mañana, quizás,
se disipe
el caliente frio
de invierno.
Mientras tras tu
cobija
me arropo,
esperando
un abril
sin aliento.

viernes, 26 de octubre de 2007

Felices 50


Cincuenta matices sonoros de tu voz en mi voz, de tu mirada de aguila, observadora de lo pequeño.
Despliegas alas que me acogen cuando caigo, despliegas risas que me acompañan cuando vuelo.
Cincuenta primaveras con sus cincuenta inviernos, floreciendo y muriendo a ratos, buscadora infatigable de la llama que en colores despliegas resolviendo sueños.
Tu mano mi mano conoce. En tu regazo mis lágrimas vertieron mil y un caminos que andar juntas, mil y una encrucijadas en las que perdernos; para reencontrarnos tras las esquinas de una flor de almendro.
Si mis palabras torpes hieren tus oídos tiernos, no te escondas de los hielos. Cuidaré el fuego que derrita la gélida nieve sin beso. Sin prisas, sin ausencias, sin miedo.
En tu casa me sentí acogida por las serenas pisadas de los que viven con la sabiduría de no esperar que se aclaren las dudas antes de tiempo.
Silencios y susurros, música y kikiriqueos llenan mi recuerdo.
Te deseo más soles, más lunas, más inviernos. Más caminos y veredas, muchos más recovecos... que de los encuentros y desencuentros, de todo eso ... aprendemos.
[Para Marta. Gracias por ser, por estar, por esperar....]

miércoles, 24 de octubre de 2007


Te me quedaste
prendido
en un poro
de mi espalda.

Con forma de flor
te añoro,
en mi boca,
sabor a pez,
te repites.

La hiel que dejaste
trabajo en almirez
para endulzarme,
para amalgamarme
con pétalos rojos,
hierbabuena y salvia
que untar en mi pecho.

Cuando abro tu puerta,
huracán
que sacude mis entrañas,
despierto confundida,
sin saber
qué pasa.

Sólo fue un sueño,
o realidad?
Sin cobijo,
arrugo
mi manta.

Lloro mi ausencia en tu ausencia,
añoro mi inocencia, mi esperanza,
lloro por los estragos sin calma,
por las heridas abiertas,
por la "noche oscura del alma",
por los amigos perdidos,
por las cometas errantes,
por las dudas con rabo,
por las manzanas abiertas
por tanta energía encontrada
en caminos de mimos surcada.


Lloro hoy, que tu rostro
se me aparece
entre legañas.

Te doy hoy este espacio
no mañana, no después.

A la palabra amor
desoigo, desobedezco,
descuido, destruyo,
descanso...
Des-nudo
Des-atasco
Des-espero.

martes, 23 de octubre de 2007

Por secar tus lágrimas





Por secar tus lágrimas
niña
y arrebatarle una promesa
al aire
pinto de verde las amapolas,
de verde la luna llena.
Cuando tus ojos veo
niña
llenos de honduras y penas
mi corazón cautivado
hace pañuelo de venas.
El tiempo,
el tiempo,
siempre el tiempo en la senda.
Más yo seguiré cantandote
niña
para que se calmen tus penas
[para chivi]

domingo, 21 de octubre de 2007

Cormoranes y brisas


Me encontré un cormorán. Herido de relojes y maneras. En mi casa traté sus dolencias, con paciencia, sin conocer si mis manos podrían devolver el soplo de viento que el tiempo le arrebatara. Luchamos durante días contra las hydras que rúgían por los balcones de las esquinas. En sus ojos mi reflejo, en los mios, apenas una rendija, sonaban sirenas sedientas de largas piernas con las que correr sobre espumas. Su esencia manaba arroyos que bebía, deseosa de calmar una sed antigua construida de ausencias y miedos.
El tambor que nos arrulla acoge ritmos dispares, ahora lentos y suaves como sus plumas, ahora rapidos y energicos como mis pies. Pero el ritmo se convierte por momentos en melodía y pasamos horas meciendonos en los brazos de un sol que despierta, estirándose por las cortinas de mi ventana.
No hay poesia? No, si son los signos gráficos los que la portan, pero entre sus manos invento cuentos, fabulas, odas en las que poner mi nombre completo. Con la luna como testigo, sin persianas, quizás encuentre el mapa de la isla donde recuperar mi tesoro enterrado de nácares y monólogos. Mientras sacudo de mi pelo las semillas de la duda para que no arraiguen en mi frente y cubran la esperanza de no recordarme, de descubrirme desnuda y sin sombrero bailando al son que marcan las estrellas, musitando hechizos que paren relojes, haciendo de segundos eternidades.
Sin coartadas.

Alas


Mirando hacia atrás,
descubrí dos bultitos en mi espalda.
Los observé
preocupada,
interesada,
curiosa.
Como si de un presagio se tratase,
esperé su eclosión.
Ayer salió la primera.
Plumón recién nacido.
La oree al sol mucho rato
y se esponjó con traje de nube.
Como se me escapó una lágrima
volvió a encogerse
así que al claro de luna
la abrí en ofrenda.
Ya consigo moverla,
ya espera repuestas,
y se prepara
a recibir
a su gemela.
Pronto
con el viento
peinaremos hebras.

jueves, 18 de octubre de 2007

Comenzando

Comenzando a vivir sin miedo, teniendo mis pies firmes en la tierra con la visión de la inmensidad del mar, del tiempo que no se cuenta, de los ojos que se encuentran.
Comenzando a tirar caparazones viejos que aprietan en las esquinas de bastillas subidas una y otra vez.
Comenzando con la mochila a medio llenar, de lo que pude rescatar sin que me rasque, de lo que brilla aún en la distancia. Con los bolsillos por llenar de colores, de risas, de lágrimas también, de caricias y ternura. Sin sitio para fajas que no me permitan moverme, para calificativos que no me permitan ser, para falsas palabras, para sentimientos fingidos.
Así, comenzando, me encuentro bailando una música interior suave, lenta, aguda y profunda que mece mi cuerpo al compás de la esperanza en una vida que promete aventuras, senderos sin mapas y algún que otro agujero.
Espero que me acompañéis en este viaje, que vuestros ojos se crucen en mis letras, como los míos se cruzan en las vuestras.
Y así comenzar JUNTAS